El Diseño no es lo más importante. A veces.
El título es porque anoche discutí con alguien (para variar) y realmente me desesperó que aún siga pensando que El Diseño de algo es la parte medular de un proceso, o lo más importante. Es decir, pensar que el acto de diseñar y el objeto final de diseño es lo principal y desplazar al producto o al proceso entero a otro plano me parece una auténtica burrada.
El Diseño es sólo una parte de un proceso de producción de un objeto (sea visual, multimedia, utilitario, mobiliario, etc) donde se consideran, se planifican y se preveen los posibles resultados con cierto margen de control de errores o imprevistos en el resultado final. Si pudiéramos colocar una línea que representara las diversas etapas en la producción de algún producto, sea visual o de otra índole, el área que ocupa la producción diseñística sería muy pequeña, y además se somete a otras muchas áreas y factores: costos, tiempos, idiomas, estudios de mercado, etc.
Un cliente no busca a un diseñador para que le resuelva la vida entera, ni los más importantes aspectos de identidad de su empresa o producto. Llega un momento en que el cliente necesita resolver las cuestiones de imagen gráfica de la misma manera en que debe resolver trámites burocráticos, licencias, pago de insumos, de nómina de personal y un enorme etcétera.
El diseño es sólo una etapa en la vida de un servicio, producto o empresa. Aunque para el diseñador se convierta en prioridad por ser de su competencia o especialidad es recomendable que se le atribuya a esta labor su justa dimensión dentro de un contexto global.
El Diseño es sólo una parte de un proceso de producción de un objeto (sea visual, multimedia, utilitario, mobiliario, etc) donde se consideran, se planifican y se preveen los posibles resultados con cierto margen de control de errores o imprevistos en el resultado final. Si pudiéramos colocar una línea que representara las diversas etapas en la producción de algún producto, sea visual o de otra índole, el área que ocupa la producción diseñística sería muy pequeña, y además se somete a otras muchas áreas y factores: costos, tiempos, idiomas, estudios de mercado, etc.
Un cliente no busca a un diseñador para que le resuelva la vida entera, ni los más importantes aspectos de identidad de su empresa o producto. Llega un momento en que el cliente necesita resolver las cuestiones de imagen gráfica de la misma manera en que debe resolver trámites burocráticos, licencias, pago de insumos, de nómina de personal y un enorme etcétera.
El diseño es sólo una etapa en la vida de un servicio, producto o empresa. Aunque para el diseñador se convierta en prioridad por ser de su competencia o especialidad es recomendable que se le atribuya a esta labor su justa dimensión dentro de un contexto global.
Comentarios
El diseño del producto es la face final... después de pensar en resolver alguna falencia del público con uno de nuestros desarrollos, estudiar su acogida, mejorarlo si es posible... nos hacemos de la poesía intrínseca del diseño para a pesar de todo enamorar a los clientes de nuestro producto, por que como dicen... todo entra por los ojos.
Nadie compra un producto por que le guste su empaque, pero un producto con un buen empaque es comprado con mas deseo... esto es ambiguo, pero podemos ver que primero se juzga si el producto es útil y luego como se verá (y la comodidad).
Y perdonen, es que me resulta un poco incómodo que haya gente que quiera ir de cultismo hablando de cosas que ni siquiera se molestó en buscar y simplificando a una nimiez un proceso tan costoso, duradero e importante como es el diseñar un objeto.